jueves, 4 de octubre de 2007

El perro guardián

Esto pasó hace casi 2 años. Era verano. era viernes o sabado a la noche.
en esos tiempos, primeros meses de un noviazgo que aun hoy continua, solíamos ir mucho a parques y plazas a besuquearnos y mimarnos a falta de un lugar propio donde desatar la pasión contenida.
Esa noche, veníamos de pasear y nos detuvimos en el parque chacabuco. Nos sentamos en un banco de marmol, enfrentados, a tomar pepsi y comer maní con chocolate.
Ese parque, que hoy podemos ver desde la ventana de nuestra casa, por las noches se puebla de drogones, fumones, ladrones y algunos creen que violadores y asesinos seriales; pero cuando uno está enamorado no se fija en esas cosas (como dice Lanata en la propaganda de Sprite: "El amor te vuelve tonto").
Estábamos ahí charlando cuando un perro, un perro cualunque con nada especial, un perro marrón, mediano, de la calle, nos miró y se acostó en el pasto a unos metros de donde estábamos.
Gente nocturna del parque pasaba por los alrededores, algunos nos miraban, otros no. Lo curioso fue cuando un par de muchachones se acercaron a nosotros un poco más de lo recomendado (no se si nos iban a hablar o simplemente pasaron cerca); el perro levantó la cabeza y gruñó levemente, los muchachos cambiaron su curso y el terror pudo verse en su mirada.
Nosotros nos quedamos un rato más en el parque. Y el perro guardián se quedó con nosotros. Otras personas pasaban cerca y el perro les gruñía.
Cuando nos fuimos le hice unas caricias y el perro me miró agradecido. Nos acompañó unos metros y luego retomó su ruta perruna.
Me gusta pensar que no estaba ahí por casualidad, que quizas era un angel de la guarda; o un espíritu protector de las almas enamoradas; o un ancestro encarnado en perro para cuidarnos, pero no creo que haya sido simplemente un can.
Ultimamente hay un perro marrón que merodea el edificio, a mi me parece que es aquel perro guardián que nos cuidó aquella noche de verano; realmente no lo se, es difícil diferenciar un perro de otro, pero sé que me mira cuando entro o salgo de casa. Y no me da miedo, me produce tranquilidad, creo que si algo me pasara él estaría ahí para ayudarme.

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